
El problema está relacionado con una plaga de garrapatas -producto del cálido invierno que hubo en Austria- que puede transmitir la "encefalitis centroeuropea". Esta enfermedad afecta al sistema nervioso central. Sus síntomas, al principio, son similares a los de la gripe, pero pueden evolucionar a parálisis y, en ocasiones, dejar secuelas permanenactes o provocar el fallecimiento. Por este motivo, la UEFA ha recomendado la vacunación como medida preventiva. Según el parasitólogo austríaco Horst Aspöck, la posibilidad de contagio en personas no vacunadas tras la picadura de una garrapata portadora del virus, es de entre el 20 y el 30 %.
Otras fuentes afirman que la vacunación disminuye el rendimiento físico y que ésta sería la única manera de que Austria pueda ganar al menos un partido.
Te dejamos una foto de este bichito asqueroso para que vayas conociendo al mejor delantero de la selección austríaca.
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