jueves, 29 de noviembre de 2007

El coleccionista de Huesos

En esta sección queremos recordar a muchos de esos "jugadores" que se encargaban de destruir literalmente a sus rivales. No es nuestra intención ponerlos en un bronce, más bien todo lo contrario. Queremos identificarlos para que la Justicia los condene a varios años de cárcel como seguramente se merecen.
Nuestro mascarón de proa es Vinnie Jones (en la foto parece que le quiere planchar la camiseta a Bergkamp porque estaba un poco arrugada), el asesino de Gales, un ex jugador inglés devenido en actor fetiche del director británico -y marido de Madonna- Guy Ritchie. Vinnie cuenta con el mayor expediente de sanciones de toda la historia del fútbol inglés (y eso que ahí dejan pegar). Fue expulsado 12 veces en su carrera, una de ellas fue la mas rápida en un partido de fútbol al ser echado a los 5 segundos de iniciado el partido. Patadas, salivazos, codazos y demás artilugios formaban parte de su muestrario que sonrrojaría al Polaco Bastía, al Chaco Torres o al Mosquito Cascini, sólo por nombrar a alguno de sus colegas. Prueba de ello, es el video con sus consejos para "aprender a jugar al fútbol" que fue todo un éxito. Ahí van algunas de sus técnicas favoritas: “Cuando derribo a un rival, siempre me ofrezco a levantarlo. Le pongo las manos debajo de las axilas y le estiro con fuerza de los pelos”. “Cuando algún contrario se me acerca demasiado, le agarro por los testículos y le digo con voz suave: ¿Te importaría retirarte un poco?”. “Si leo en el diario que la mujer de un rival se ha largado con otro, se lo recuerdo oportunamente durante el partido”.
Vinnie tuvo, pese a estas virtudes, una dilatada trayectoria en la liga inglesa. Comenzó en el desconocido Wealdstone en 1984 antes de mudarse al modesto Wimbledon FC en 1986. Allí vivió sus años dorados en un equipo muy similar a Arsenal (de Sarandí, claro) por su abundancia de golpes, su escasísimo juego y sus goles 100% pedorros. Por este particular estilo de juego, la prensa inglesa los denominó "Crazy Gang" (La Pandilla Loca). Su mayor éxito fue la obtención de la legendaria FA Cup en 1988 venciendo en la final al Liverpool por 1-0. Vinnie, tambien jugó en Leeds United, Sheffield United y Chelsea.
Su mejor actuación fue cuando marcó a Paul Gascoigne: Lo derribó 14 veces, le escupió en la cara, lo amenazó de muerte y, (como se aprecia en la foto) le hizo un "apriete". Sobre esa acción particular se despachó con una dulce frase: "Me cuesta creer que todavía Paul pueda usarlos".
Vinnie, consciente de sus limitaciones, decidió jugar para la selección de Gales -disputó 8 partidos- en lugar de la inglesa, ya que tenía una estrecha relación con su abuelo que era de esa región (y porque en la inglesa nunca iba a jugar).
Luego de retirarse del fútbol en 1999, inició su carrera como actor. El director Guy Ritchie lo convoca siempre para personificar a matones sanguinarios, papel que Vinnie cumple a la perfección. Entre sus éxitos podemos citar: Sworfish, Snatch y X-Men 3
Para cerrar te dejamos una frase en la que aflora toda su sabiduría similar a la de un maestro Zen: “Ganar no es lo importante, siempre y cuando ganes.”

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